miércoles, 1 de agosto de 2012

Siem Reap (Angkor Wat)

26 de Julio
He amanecido en Siem Reap, he alquilado una bici y me voy a Angkor Watt, que está a unos 12 kilómetros de la ciudad. Cuando llego, hay un control de acceso donde me piden la entrada. No tengo entrada, si acabo de llegar. Pues la entrada la tienes que comprar cinco kilómetros más atrás, por la otra carretera. Ahh, muy bien (5 y 5, 10). Cuando consigo la entrada, vuelvo por otra carretera que no tiene control de acceso (…)


Angkor wat

Un poco de Historia.

Érase una vez un reino tan poderoso que su capital albergaba más de un millón de habitantes en el año 1100 de nuestra era. Lo único que construían en piedra eran las murallas, los diques y los templos, y eso es lo que medio se ha conservado hasta nuestros días. La ciudad, de planta cuadrada estaba rodeada de un foso y tenía cinco puertas. La mayoría de los templos estaban a las afueras de la ciudad. Angkor Watt, el más afamado de nuestros días, está rodeado de un foso de 200 metros de anchura y ocupa un cuadrado de una milla de lado.
En el devenir de esta civilización, por culpa de dimes y diretes y de algún que otro problemilla de abastecimiento, muchas bocas que alimentar, la ciudad fue abandonada a su suerte, la suerte de la jungla, que la enguyó literalmente hasta hace pocos años, que pusieron un control de acceso y las entradas a 20 $.
Esta historia está basada en hechos reales.




Templo con muchas caras, la del rey.


Templo del rey egocentrico que todo lo ve


Este árbol le tocó nacer al lado de un templo




Foso de agua que rodea Angkor wat


La piedra arenisca se talla muy bien


Entrada a la ciudad, los dioses tirando de una serpiente, al un lado


Los demonios al otro lado



Por la tarde he tenido que dejar algún templo que otro sin ver; no veía mucho sin gafas, y menos con ellas con la que me estaba cayendo, así que me he dado prisa en volver.
Sabía que Mauricio podía andar por la ciudad, pero difícil encontrarnos. Así que me he ido con la bici a buscar algo para comer. Esquivando peatones, me ha cogido uno del brazo, ¡era Mauricio¡ Nos hemos ido a celebrarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario